Aun estamos en el feriao del Bicentenario y, como si estuviesemos en la víspera del año nuevo, tengo mi lista de propósitos que no dejaré de cumplir porque soy absolutamente capaz de hacerlo.
Creo que la fotografía muestra cuál es uno de ellos, además de ser más rubia jajaj es lo del peso. Y no lo hago meramente por vanidad. Ocurre que hace una semana el colon no me deja vivir. Amanezco bien pero en la tarde soy un fiasco, mi abdomen toma un volumen inaudito. un día domingo, cuando tuve mi primera crisis (de este año) Oscarín se asustó tanto que partió a la farmacia y no sé cómo le vendieron un remedio sujeto a control de psicotrópicos. Tiene que haber sido tal su desesperación o susto que le vieron y le vendieron. Para ser sincera no me alivió mucho pero me hace seguir funcionando.
Sin lugar a dudas, asistiré al doctor a que me diga qué anda mal conmigo. Por lo pronto a dejar las chanchumbres y alimentarse lo más equilibradamente posible!
Bye!
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